La calidad de vida de los pacientes con enfermedades alérgicas se suele ver afectada ya que estas patologías generan tanto un impacto social y laboral como gastos directos e indirectos. Actualmente hay múltiples cuestionarios de calidad de vida validados para cada enfermedad en los que se constata el deterioro que causan en la vida de los enfermos que las padecen.
La alergia a venenos de himenópteros genera ansiedad y miedo por el riesgo a sufrir una reacción anafiláctica con un potencial riesgo de desenlace fatal. En Europa las anafilaxias por picaduras de himenópteros suponen el 48,2% de las anafilaxias sufridas en pacientes adultos y el 20,2% de las que padecen los niños. Existen cuestionarios específicos, como por ejemplo el HiCaVi, que valoran la calidad de vida en estos pacientes. El HiCaVi consta de 14 preguntas que valora la afectación de la calidad de vida en diferentes ámbitos en los pacientes mayores de 14 años. Por el momento, este cuestionario no se encuentra validado para pacientes pediátricos ni para apicultores.
Mención especial requieren los pacientes apicultores que sufren reacciones con las picaduras de himenópteros, en los que es considerada enfermedad profesional. En estas personas la calidad de vida se ve aún más mermada ya que influye de forma directa en el ámbito del trabajo y puede tener repercusiones laborales y económicas. Por este motivo, por lo que el HiCaVi no se encuentra validado para los apicultores.
Existen numerosos estudios en los que se valora la modificación de la calidad de vida en pacientes con alergia a himenópteros tras facilitarles autoinyectores de adrenalina y tras administrar inmunoterapia específica. En los pacientes a los que exclusivamente se les daba el autoinyector de adrenalina no se objetivó una mejoría en la calidad de vida a pesar de que la mortalidad por anafilaxia tras picadura desciende de forma importante. Los pacientes suelen percibir dicho tratamiento como molesto ya que hay que llevarlo consigo siempre. Esta percepción negativa favorece la falta de adherencia al mismo. En cambio, en los pacientes en los que se administró inmunoterapia específica, tras solo un año de vacunación el cuestionario de calidad de vida mostró ya una mejoría con respecto al inicial previo. De igual forma, se ha comprobado que en los pacientes en los que se sometieron al tratamiento de inmunoterapia, realizar una repicadura controlada mejoraba los resultados del cuestionario de calidad de vida ya que disminuye el estrés y la ansiedad debidas a la incertidumbre de sufrir una nueva picadura espontánea.
Por lo tanto, podemos ver cómo la alergia a venenos de himenópteros supone una disminución de la vida de los pacientes que la sufren y cómo esta puede mejorar sustancialmente con los tratamientos que existen actualmente para dicha enfermedad, en concreto la inmunoterapia específica.
María Dolores Rodríguez Bote.
Médico Especialista en Alergología. Miembro del comité de alergia a himenópteros.
Referencias:
1. Bemaniyan MH, Heidari M, Tavakol M, Nabavi M, Ramezani Kashal F, Gholami M, et al. A Quality-of-life Study in Patients with Anaphylaxis to Hymenoptera Venom in Iran. Iran J Allergy Asthma Immunol. 11 de febrero de 2024;23(1):59-68.
2. Alfaya T, Vega A, Domínguez-Noche C, Ruiz B, Marqués L, Sánchez-Morillas L. Longitudinal Validation of the Spanish Version of the Health-Related Quality of Life Questionnaire for Hymenoptera Venom Allergy (HRQLHA). J Investig Allergol Clin Immunol. 2015;25(6):426-30.
3. Oude Elberink JNG, van der Heide S, Guyatt GH, Dubois AEJ. Immunotherapy improves health-related quality of life of adult patients with dermal reactions following yellow jacket stings. Clin Exp Allergy J Br Soc Allergy Clin Immunol. junio de 2009;39(6):883-9.